A veces los límites nos vienen dados


Muchas veces los límites no los ponemos nosotros/as, nos vienen dados. Por ejemplo: si mamá está cansada, mamá está cansada y eso trae un límite.

Hay límites que no se eligen sino que los trae la vida por el hecho de estar vivos o el hecho de estar en ciertas circunstancias. Hay límites que decidimos teniendo en cuenta distintos aspectos, pero hay otros que nos vienen dados por la vida por el momento vital, por las circunstancias como que nos encontramos y podemos elegir escucharnos o no.

El ser humano nace en una experiencia fusionar: el primer límite que se establece es el nacimiento. A partir de ahí pasamos de una situación de absoluta fusión a una ruptura a través de una experiencia traumática y dolorosa. Eso nos lleva como la primera separación y al primer límite.

Ahí empieza la diferenciación y el establecimiento de los primeros límites.

 

 

 

(Imagen: Cortesía de Ashwini Chaudhary)

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